Mural del Camino al Cielo - Templo San Pedro Apóstol de Andahuaylillas

Esta pintura se encuentra en el muro de pies y es atribuida a Luis de Riaño. Se trata de una obra inspirada en un grabado de finales del siglo XVI del flamenco Hieronymus Wierix. Describe la difícil y angosta senda de la vida, que cubierta de espinas lleva a los individuos hacia el cielo.

Como señala la Biblia, esta senda no es fácil, y está llena de sacrificios; pero tiene como premio la vida eterna junto a Dios en el cielo. Se observan dos escenas: En la del primer plano más grande, está servido un banquete alrededor del cual hombres y mujeres disfrutan de comida y bebida; sin embargo, uno elegantemente vestido, está de pie entre esta escena y la del camino, mira el banquete y está en actitud de dubitación, si seguir por la senda del bien, dejando el banquete o mejor dicho, los placeres mundanos que no llevan a buen destino o seguir la senda del bien.

En segundo plano se observa un paisaje de inmensidad, como suspendido entre nubes. Hacia el lado superior derecho, sobresale el edificio de varios niveles, uno de los cuales cuenta con ventanas donde personajes dirigen sus miradas hacia el camino y encima una especie de balcón donde están de pie, tres personajes iguales. El edificio es la representación del cielo y los personajes representan la Trinidad. En el camino empinado tres personas pintadas de blanco, insinuando que son sus “almas”, suben por la senda hacia la puerta de la edificación donde espera un personaje para abrir la puerta.

Por las características físicas de los tres varones en el camino, es fácil deducir que representan las edades del hombre: un joven está más cerca de la puerta, seguidamente un hombre maduro es acompañado por un ángel y finalmente el hombre viejo que inicia el camino, de cuya cabeza y boca, salen tres líneas que van dirigidas hacia las manos de la “Trinidad”. Sin embargo, una cuerda gruesa negra toca el “alma” del hombre mayor. La cuerda atraviesa el espacio de la puerta del templo, desde el mural del Camino al Infierno, que está al lado opuesto, donde la figura del demonio sujeta dicha cuerda.


Retablo mayor - Templo San Juan Bautista de Huaro

El primer retablo, del cual sólo queda el sagrario, fue realizado por Martín de Torres a principios del s. XVI. El que ahora se ve, fue realizado entre 1778 y 1784 por Pascual Velazco. Destacan las columnas del primer cuerpo que advierten la técnica del calado, un recurso estético poco común en la región. En cuanto a las modificaciones más reconocidas son las incrustaciones de plata en el tabernáculo, las cuales fueron realizadas por el platero Melchor Minauro.


Conservación de los templos

El proceso de conservación de los templos que forman parte de la Ruta del Barroco Andino, permite preservar su arquitectura y restaurar las obras de arte que poseen en su interior, como las pinturas murales, los lienzos, las esculturas, la platería, las cerámicas, las alfombras y las casullas.

Esta labor es posible gracias a un grupo de profesionales cusqueños expertos en labores de restauración, que combinan las últimas técnicas de conservación con procesos ancestrales y la utilización de materiales locales.
Los ingresos generados por la visita a los templos y el consumo en las tiendas de la Ruta del Barroco Andino son dirigidos a la conservación de los templos y a mejorar las condiciones de vida de los pobladores, a través de las obras sociales de los jesuitas.

✨️ "Deja que los templos de la Ruta del Barroco Andino te cuenten la historia"


Figuras en el Atrio del Templo de Huaro

Esta hermosa composición de piedras de canto rodado, que se encuentra en el amplio atrio del Templo San Juan Bautista en Huaro, permaneció oculta hasta el 2007. Cubierta de pasto, era propicia para el esparcimiento o descansar en familia luego de la misa. Solo con el proceso de restauración de la iglesia es que se descubre que las piedras en el fondo no eran una simple base, sino que seguían patrones y colores que componían una obra de arte a los pies de la iglesia 

 


Altar de la sagrada familia en la Capilla Virgen Purificada de Canincunca

El lado del Evangelio de la Capilla Virgen Purifica de Canincunca, está dedicado al Altar de la Sagrada Familia. Una preciosa hornacina empotrada en la pared, que contiene las esculturas de la Virgen, San José y el Niño Jesús.


“La Muerte”, pintura mural del Templo San Juan Bautista de Huaro

Un impresionante mural ubicado en el muro del Evangelio del Templo San Juan Bautista de Huaro, forma parte de las “Postrimerías” y muestra una variada iconografía que representa cuan frágil y corta puede ser la vida, la igualdad de los hombres ante la muerte, no solo en edad sino en la categoría social. Realizado por el muralista Tadeo Escalante a fines del siglo XVIII y principios del siglo XIX.


Camino al Infierno y Camino al Cielo”. Templo San Pedro Apostol de Andahuaylillas

En el ingreso principal al Templo San Pedro Apóstol de Andahuaylillas, se encuentran dos preciosos murales. El “Camino al Infierno”, representa la senda que sigue el impío, el camino de la vida lleno de rosas y placeres, sin embargo, es la senda que conduce al infierno. El “Camino al Cielo”, representa la difícil y angosta senda de la vida, que cubierta de espinas lleva a las personas hacia el cielo.


Altar principal del templo de la Compañía de Jesús

La imponencia del Altar Mayor del templo de la Compañía de Jesús, resalta a primera vista. Tiene 21 metros de alto por 12 metros de ancho, es una talla en madera de cedro, de gran calidad y solidez, totalmente dorado con pan de oro. Fue construido por Cristóbal Clemente en 1670 y es de estilo Barroco.


Ingreso principal del Templo San Juan Bautista de Huaro

Los tres arcos que sostienen el coro, están decorados en su anverso y reverso. Muestran a San Juan Bautista y San Pedro como protagonistas. En uno de los lados están los arcángeles junto a la Sagrada Familia, al otro las virtudes: Prudencia, Justicia, Fortaleza y Templanza.


mirador plaza armas cusco

El mejor mirador de la Plaza de Armas de Cusco

La Plaza de Armas de Cusco es el lugar más concurrido por los visitantes a la ciudad imperial.  Sin duda, es el corazón de la ciudad, por su belleza monumental y significado histórico. Los incas la llamaban Haucaypata, que significa "andén del descanso" de acuerdo a los documentos de los siglos XVI - XVIII. También tiene el significado de“la plaza de Cuzco, de las fiestas, huelgas y borracheras”,  según el importante diccionario quechua de Diego González Holguín, escrito en el siglo XVII [1608].  El Inca Garcilaso de la Vega, también nos da a entender su nombre, al describirla:

Delante de aquellas casas que fueron casas reales está la plaza de la ciudad, llamada Haucaipata, que es andén o plaza de fiestas y regocijos. Tendrá norte sur, doscientos pasos de largo poco más o menos que son cuatrocientos pies, y leste hueste, cincuenta pasos de ancho hasta el arroyo [...] (1609).

El Haucaypata fue un espacio sagrado, que estuvo cubierto por una capa fina de arena traída de la costa, la cual era renovada y completada. La arena del mar en el piso de la plaza inca, significaba presencia de las cualidades de la Mamaqocha, de tal manera que al cubrirla con la arena, la convertían simbólicamente en otro mar, a la que se le ofrendan, así como a la Pachamama o Madre Tierra. 

El Haucaypata fue el centro del poder religioso y administrativo de los incas. Aquí se encontraban los palacios de los gobernantes y de la élite inca. 

En la época colonial, los españoles reemplazaron las edificaciones incas existentes por arquitectura de culto. La Catedral del Cusco se construyó sobre el Qiswarkancha (palacio de Wiracocha), y la Compañía de Jesús sobre el Amarukancha (Palacio de Huayna Cápac). También se construyeron las casas con portales delanteros, donde se establecieron comercios sectorizados, apareciendo los nombres de Portal de Confituría, Comercio, Panes, Harinas, Carrizos, Belén, que existen hasta la actualidad.  

Actualmente la Plaza de Armas de Cusco está rodeada de construcciones coloniales y republicanas, que tienen una armonía y estética única, y forma parte del Patrimonio Cultural de la Humanidad.

La plaza se aprecia mejor desde la altura, y el mejor mirador se encuentra en las ventanas de nuestro templo de La Compañía de Jesús.  Todos los visitantes que ingresan a la iglesia, pueden subir a las dos ventanas que se encuentran en las torres gemelas del templo. Desde aquí, se tiene una vista privilegiada de la plaza de armas de Cusco, como nos lo muestran, nuestros visitantes en estas fotos:

mirador plaza armas cusco

Foto de @go4theglobe en instagram

También se tiene vista de la Catedral

mirador plaza de armas cusco

Foto de @lashes.staches en instagram

Mirador plaza de armas cusco

foto de @geocusco en instagram

Las ventanas de la Compañía de Jesús son un excelente espacio para tener un hermoso recuerdo de la arquitectura barroca andina, como lo muestra esta fotografía de @jocekarlos

plaza de armas cusco

Visitando la Compañía de Jesús, podrás apreciar una de las joyas del Barroco Andino, acceder al mejor mirador de la Plaza de Armas, así como contribuir a las obras sociales de los Jesuitas en la provincia de Quispicanchi, al sur de Cusco.  Los costos de entrada y horarios pueden chequearlo en Planifica tu visita.
¡Esperamos tu pronta visita!