Alegoría de la hora de la muerte – Templo San Juan Bautista de Huaro
Ubicada en el muro de la nave junto al espacio del sotocoro, muestra variada iconografía que representa la fragilidad y cortedad de la vida, la igualdad de los hombres ante la muerte, no solo en edad sino en la categoría social, se le atribuye a Tadeo Escalante. Siglo XVIII.
La Muerte marca la hora del fin con su reloj de arena y la segadora de trigo, símbolo del corte de la vida. El Homo Bulla juega con pompas de jabón que simbolizan la fragilidad de la vida.
Símbolos que aluden a jerarquías eclesiásticas y poderes civiles, como príncipes o reyes, así como papas o cardenales y con ello demostrar que no existen límites del actuar de la Muerte.
La Muerte acompaña la cuna de un infante, mostrando que para ella no existen límites temporales de la vida. El demonio acecha debajo de la cama, con el propósito de acarrear el alma a su poder.